Depresión

La depresión es un trastorno del estado de ánimo que, en la actualidad, constituye la cuarta causa de enfermedad o discapacidad en todo el mundo.

La depresión es un  trastorno del estado de ánimo que se caracteriza por la presencia de alguno de los siguientes síntomas:

Estado de ánimo deprimido: sentirse, triste, desesperanzado, desanimado o “por los suelos”

Disminución del interés o placer por casi todas las actividades, incluidas aquellas que anteriormente se consideraban placenteras

Pérdida o aumento de peso

Insomnio o hipersomnia (exceso de sueño por la noche o durante el día)

Agitación psicomotora (incapacidad para estar quieto y permanecer sentado, frotarse la piel con las manos, retorcerse las manos) o enlentecimiento motor (discurso, pensamientos y movimientos ralentizados)

Fatiga, cansancio o pérdida de energía: las tareas más pequeñas requieren un esfuerzo desmesurado, como puede ser levantarse de la cama y ducharse, requiriendo más tiempo del habitual

Sentimiento de inutilidad o culpabilidad excesiva: se siente con poca o nula valía, analiza una y otra vez pequeños errores del pasado, se siente excesivamente responsable por determinados hechos. Es habitual que las personas con depresión se culpen a sí mismas por estar mal y no poder cumplir con las responsabilidades laborales o sociales como consecuencia de la depresión. Suelen describirse como “débiles”, “inútiles “o “como una carga para los demás

Dificultad para concentrarse o tomar pequeñas decisiones: problemas de memorias, déficit de atención, provocando frecuentemente una disminución en el rendimiento académico o laboral

Pensamientos de muerte recurrentes, ideación suicida o intentos de suicidio: pueden situarse en un continuo que van desde pensamientos pasivos tales como “ojalá no me despertara mañana”, “los demás estarían mejor si estuviera muerto” hasta tener establecido un plan concreto de suicidio.

Cabe destacar que los niños y adolescentes suelen presentar un estado de ánimo irritable o malhumorado en lugar de un estado de ánimo triste o abatido. Esta irritabilidad puede darse también en adultos (especialmente en varones) en forma de estallidos de rabia o como frustración excesiva por acontecimientos menores.

Asimismo, algunas personas presentan quejas somáticas (dolores de cabeza, problemas gastrointestinales, dolores musculares) en lugar de manifestar tristeza. Todos estos síntomas provocan un enorme sufrimiento y provocan un deterioro en su funcionamiento laboral, social o en otras áreas importantes. En algunos pacientes, el funcionamiento puede parecer normal, pero implica un esfuerzo notablemente elevado.

A pesar de ser un trastorno que puede llegar a ser muy incapacitante, la depresión es altamente tratable. Por ello si crees estar padeciéndola, no dudes en solicitar ayuda. Desde el Instituto de Psicología Morgenstern podemos ayudarte a hacer frente a la depresión, ajustándonos a tu ritmo y a tus necesidades.  

Contacto

¿Quieres pedir cita?
¿Necesitas más información?

Puedes contactar conmigo por teléfono, whatsapp, e-mail o mediante el siguiente formulario